El BRI Restaurante, situado en Palma (Mallorca), ofrece una cocina y un servicio innovadores, siguiendo las nuevas tendencias con producto de proximidad y comida de temporada. Aparte de eso, concienciado con la problemática climática de la sociedad actual dispone de una política activa de reducción de emisiones, que consta de varias líneas de actuación: reducción del desperdicio alimentario, eficiencia energética, reducción del consumo de agua, prevención y reciclaje de los residuos, cálculo, reducción y compensación de la huella de carbono.

En línea con la Ley del cambio climático y transición energética de las Islas Baleares aprobada este pasado mes de febrero, donde el principal objetivo es alcanzar unas Islas libres de combustibles fósiles en 2050, BRI Restaurante ya cuenta con una estrategia de cambio climático iniciada al año 2010.

Este año, el restaurante ha calculado las emisiones corporativas de los años 2015, 2016, 2017 y 2018. En el cálculo se han incluido tanto las emisiones directas derivadas del consumo de gas natural como las emisiones indirectas derivadas del consumo de energía eléctrica, de bienes y servicios, de los residuos generados y de la flota de vehículos propia de la plantilla.

Adicionalmente, ha compensado las emisiones que por su actividad no son posibles de evitar, cerrando un acuerdo de colaboración con el proyecto Andra Pradesh. Se trata de un proyecto de generación de energía eólica ubicado en la India que cuenta con la certificación de Verified Carbon Standard. El proyecto trabaja para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, reduce 8.152 tCO2e cada año, mejora el servicio de suministro eléctrico en la zona, mejora la calidad del aire y genera oportunidades de trabajo y actividad económica.

El certificado Clean CO2 que ha obtenido BRI Restaurante, acredita el compromiso de la organización con la lucha contra el cambio climático.